24 de julio de 2009

Puta fuente de inspiración


El oficio más antiguo del mundo y el más controversial, más que el de chofer de López Obrador y de director técnico de la Selección Mexicana de fútbol, es el de la prostituta, la puta, la golfa, la mujer de la vida galante, la dama de compañía, mil polvos, alcahueta, buscona, calienta camas, celestina, chica de atasco, chupetera, coneja, cortesana, cualquiera, currulaca, dama de la noche, esclava sexual (no estoy pasando lista), esquinera, furcia, gata, guarra, hurona, indecente, inmoral, jinetera, la otra, ladillera, lagartona (¡que fino ando!), lame prepucios, libertina, ligona, loba, madonna, magdalena, mamadera, mamona (¡vamos de mal en peor!), manfla, masturbadora (muy correcto ¿no?), mil maridos, mortadela (¿y el culinario?), mujer de chulos, mujer de mala vida, mujerzuela, ninfómana, ordeñadora, pajarera, pecadora, perica, piculina, pollera, promiscua, prosti, putita (de cariño), putona, quedona, ramera, rastrera, rebuscona, saca semen (no’mbre si andas…), señorita de moral distraída, servidora del placer, soba pollas, suripanta, taconera, talonera, tigresa, tipa, tipeja, trabajadora del amor, trotadora, una cualquiera (ya estuvo ¿no?), vampiresa, zorra… y después de las “poquianchis” de la A a la Z, es tiempo de de ponernos serios.

Esta controvertida profesión “escogida” por algunos como salida fácil y de ingresos remunerables, por otros por necesidad y por unos cuantos más como imposición, es adoptada tanto por mujeres como por hombres, por ancianos y niños, desafortunadamente por estos últimos, ya que en algunos casos va acompañado de pornografía infantil y es triste saber que en ocasiones sus padres son quienes los obligan hacer eso.

Pero démosle un giro distinto a este artículo y no hablemos de su triste o alegre situación, si debemos seguir el ejemplo de países como Holanda donde está legalizada y gozan de seguro social (apoyo esa noción, pero con mojigatos en el poder que se asustan al escuchar la palabra pene o vulva, y se flagelan y se avientan 4 letanías para limpiar su alma de esas “cosas del diablo”, esta difícil), démosle un giro poético al más puro estilo del señor Jaime Sabines, además recordemos que antiguamente el rito de iniciación en la vida sexual (aún en la actualidad), la mentada “primera comunión” se hacía con uno de estos seres creados por Dios para satisfacer los deseos carnales del hombre.

Señores prejuicios, si Jesús las perdono, recordemos “quien esté libre de culpa que lanza la primera piedra” además, que me dicen de María de Magdala (María Magdalena) ella se dedicaba a eso y dejó la profesión al conocerlo, pero no hay que crear controversias si era su esposa, su amante o mujer, el caso es que si él pudo absolverla nosotros como sociedad también.

“No engañas a nadie, eres honesta, integra, perfecta; anticipas tu precio, te enseñas; no discriminas a los viejos, a los criminales, a los tontos, a los de otro color […] eres la libertad y el equilibrio; no sujetas ni detienes a nadie […] eres pura presencia, fluidez, perpetuidad […]Oh puta amiga, amante, amada, recodo de este día de siempre, te reconozco, te canonizo a un lado de los hipócritas y los perversos, te doy todo mi dinero, te corono con hojas de yerba y me dispongo a aprender de ti todo el tiempo” (Fragmento “Canonicemos a las putas”, Jaime Sabines).

También el señor Gabriel García Márquez, en su novela “Memoria de mis putas tristes” relata la historia de un anciano que en su cumpleaños noventa decide regalarse una noche de pasión con una jovencita virgen, a la que llama Delgadina, enamorándose por vez primera y contándonos los detalles de esta relación.

Por eso yo lo veo como una fuente de inspiración, manantial de aguas turbias que satisfacen la sed de sexo, que complacen a cambio de unas monedas, sin pedir ser amadas ni llamadas por su nombre; una caricia, un beso, un abrazo. Feroces como gatas en celo pero delicadas como la pluma de un pavo real. Fuentes inagotables de deseo y de lujuria, al servicio de aquellos que necesitan el auxilio del consuelo. Por eso, al igual que Sabines también pido, canonicemos a las putas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

comunista de mierda si quieres joder tu vida con esa utopia es tu problema dejanos vivir como nos de la gana socialista de mierda